No fue el mejor verano o al menos no fue todo lo bueno que esperaban, pese a que ya se consolidó como una nueva forma de vacacionar en España. Se trata del turismo rural, que apareció desde hace algunos años muy tímidamente en Galicia y hoy ya se sitúa como la segunda comunidad del Estado.
En lo que fue el primer período de la temporada estival, la región registró un 69% incluso hasta principios de agosto, algo que hizo público en un informe la Xunta. Pero los números aún pueden mejorarse, ya que agosto es el mes más fuerte en cuanto a vacaciones en zonas rurales.
No hubo mayores variaciones hasta el momento comparándolo con lo que fue el verano del 2009. Entonces, también la Cornisa Cantábrica, Navarra y Cataluña fueron los más visitados, pese a esta vez, sólo Asturias aparece por sobre Galicia en cuanto a ocupación en alojamientos rurales. Esto, se debe, principalmente al fuerte impulso del turismo rural en Coruña, una ciudad que decidió apostar fuerte a ello a meced de un declive en los hoteles de gran trayectoria.
En lo que fue el primer período de la temporada estival, la región registró un 69% incluso hasta principios de agosto, algo que hizo público en un informe la Xunta. Pero los números aún pueden mejorarse, ya que agosto es el mes más fuerte en cuanto a vacaciones en zonas rurales.
No hubo mayores variaciones hasta el momento comparándolo con lo que fue el verano del 2009. Entonces, también la Cornisa Cantábrica, Navarra y Cataluña fueron los más visitados, pese a esta vez, sólo Asturias aparece por sobre Galicia en cuanto a ocupación en alojamientos rurales. Esto, se debe, principalmente al fuerte impulso del turismo rural en Coruña, una ciudad que decidió apostar fuerte a ello a meced de un declive en los hoteles de gran trayectoria.
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